El siete de noviembre nació en Polonia una de las mentes más brillantes de la humanidad: Marie Curie fue física, matemática y química. Nació en la ciudad de Varsovia, a los 24 años se trasladó a Francia, donde se nacionalizó. Estudió Física en la Sorbona y obtuvo su título como la primera de su promoción. Igualmente se graduó en Matemáticas y terminó segunda de su grupo. Fue la segunda mujer en obtener un doctorado en tiempos en los cuales era complejo para ellas estudiar y abrirse campo en las ciencias.

Marie Curie se casó con el científico y profesor de física Pierre Curie. Dicha relación duró 11 años hasta que él murió en un accidente. La relación de Curie con Pierre fue una de las relaciones más fructíferas para ambos al punto en que se colaboraron mutuamente en las investigaciones científicas que adelantaron. 

Incluso, Pierre colaboró con Marie Curie durante su presentación del doctorado. El 25 de junio de 1903, ella presentó su tesis doctoral “Investigaciones sobre las sustancias radiactivas”, ante un tribunal presidido por el físico Gabriel Lippmann. No solo obtuvo el doctorado, sino que además esta tesis fue laureada mediante la  mención cum laude.

La expectativa que despertó Marie Curie con su primera lección sobre la radioactividad en la Universidad de la Sorbona fue mayúscula, pues era la primera mujer científica que impartía cátedra. Aquel 15 de noviembre de 1906 acudió un número grande de personas, muchas de las cuales ni siquiera eran estudiantes. 

Posteriormente, Curie fue la primera mujer galardonada con el premio Nobel de Física en 1903, en reconocimiento por sus estudios sobre los fenómenos de la radioactividad descubiertos por Henri Becquerel. 

Volvería a recibir otro premio Nobel, esta vez en Química, en “reconocimiento por sus servicios en el avance de la Química y por el descubrimiento de los elementos radio y polonio, el aislamiento del radio y el estudio de la naturaleza y compuestos de este elemento”. A pesar de realizar dichos aportes científicos, prefirió no patentarlos, para dejar que la comunidad científica pudiese realizar libremente el proceso de aislamiento del radio. Así, se convirtió en la primera persona que en la historia recibió dos veces el premio Nobel por sus aportes en física y química. 

Marie Curie fue, además, madre de otras dos importantes mujeres: la científica Irène Joliot-Curie, quien recibió el premio Nobel en Química en 1935 por sus investigaciones sobre la radioactividad artificial, y  Eva Curie, quien fue periodista, pianista, escritora y activista por los derechos infantiles.

Después de quedarse ciega, Marie Curie murió en 1934, víctima de una anemia aplásica. Se cree que esto se debió a los efectos nocivos producidos por la radiación.

Gracias a su importancia y a sus aportes a la humanidad, se convirtió además, en la primera mujer que reposa en el famoso Panteón de París.