CI.- Aunque existe una mínima disminución en el asesinato de liderazgos sociales, firmantes de paz y masacres en comparación con el año anterior, persiste la persecución en los territorios donde se fortalece la expansión del paramilitarismo y sus vínculos con las fuerzas militares.
Según la Defensoría del Pueblo, entre el 1 de enero y el 30 de abril de 2025, en Colombia se registraron 69 asesinatos de líderes, lideresas sociales, defensores y defensoras de derechos humanos. 60 de las víctimas eran hombres y 9 mujeres.
Cauca, Antioquia, Norte de Santander y Valle del Cauca son los departamentos con el mayor número de víctimas en Colombia.
De igual forma, la Defensoría denunció el asesinato de 20 firmantes de paz hasta el 30 de abril del presente año. Norte de Santander, Antioquia y Huila son los departamentos colombianos donde más casos se han presentado.
Igualmente, la Defensoría señaló que en el mismo periodo de tiempo en Colombia ocurrieron 22 masacres en las cuales fueron asesinadas 67 personas.
Nuevamente, Norte de Santander, Valle del Cauca y Antioquia son los departamentos con el mayor número de masacres ocurridas desde enero hasta abril del presente año.
Entre enero y abril de 2025 Colombia ha sido testigo de una grave realidad:
➡️ 69 lideresas y líderes sociales asesinados
➡️ 20 firmantes de paz asesinados
➡️ 22 masacres con 67 víctimas📍 Norte de Santander, Antioquia, Cauca y Valle del Cauca son los departamentos que… pic.twitter.com/eiXv2a7uTL
— Defensoría del Pueblo (@DefensoriaCol) May 19, 2025
La tragedia humanitaria que viven los liderazgos sociales y las comunidades
El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) informó sobre el asesinato de Freddy Ballesteros, líder comunitario y actual presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Milagro. Ballesteros murió asesinado en la zona rural del municipio de Tibú, Norte de Santander, el 19 de mayo de 2025.
Indepaz dijo que el líder social se desplazaba en una motocicleta por una vía que comunica los sectores de La Serena y El Serpentino, en la región del Catatumbo.
En la región operan la Segunda División del Ejército colombiano, el ELN y las disidencias del llamado Frente 33. Desde enero del presente año, el grupo insurgente del ELN se enfrenta a las disidencias del Frente 33.
Denuncias de habitantes de la región advierten de la existencia de una alianza entre integrantes de las disidencias con las Fuerzas Militares para enfrentar la arremetida del ELN.
👥 Nombre: Freddy Ballesteros
📆 19/05/25
📍 Tibú, Norte de Santander➡️ Freddy Ballesteros, reconocido líder comunitario y actual presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Milagro. Fue asesinado en la zona rural del municipio de Tibú pic.twitter.com/3QAY9wY75z
— INDEPAZ (@Indepaz) May 20, 2025
Otra masacre en el Catatumbo
El pasado 18 de mayo, tres personas fueron asesinadas en una masacre ocurrida en el municipio nortesantandereano de Ocaña.
Hombres armados que se movilizaban en motocicletas dispararon contra las víctimas cuando departían en una vivienda en horas de la noche.
Indepaz afirma que en la región operan la Segunda División del Ejército, las disidencias del Frente 33 y una estructura del EPL, los cuales mantienen una guerra con el ELN.
Desde la firma de los acuerdos de paz en 2016 hasta la fecha, 1769 lideresas y líderes sociales fueron asesinados en Colombia. Además, Indepaz denunció que desde la firma de los acuerdos, 459 firmantes de paz fueron asesinados.
Auge paramilitar del Clan del Golfo
El Clan del Golfo (Ejército Gaitanista de Colombia -AGC-) es el grupo con mayor presencia en Colombia. Según la Defensoría del Pueblo, tiene presencia en 24 de los 32 departamentos de Colombia, lo que equivale al 75% del territorio nacional, y opera en 392 municipios del país.
Los departamentos con mayor presencia del Clan del Golfo son Antioquia, Chocó, Córdoba, Bolívar, Meta, Nariño, Cauca, Valle del Cauca, Cesar y Cundinamarca.
En Antioquia, se expandieron a las subregiones del Bajo Cauca, Nordeste, Norte y Suroeste. Además, el Clan del Golfo tiene presencia en ciudades como Bogotá, donde se disputa el control territorial con el Tren de Aragua.
Este grupo opera a través de cinco bloques regionales: Central Urabá, Roberto Vargas Gutiérrez, Jairo de Jesús Durango, Nelson Darío Hurtado y Arístides Mesa Páez. Cada bloque agrupa varios frentes armados que ejercen control local y ejecutan operaciones criminales.
El Clan del Golfo aumentó su crecimiento, gracias a que absorbió las facciones de otros grupos narcoparamilitares y al reclutamiento de exguerrilleros de las desaparecidas FARC, tras los incumplimientos del Estado a los acuerdos de paz. Dicha situación ocurre especialmente en Nariño y el Bajo Cauca.
Antioquia: 40 años como bastión del paramilitarismo
Óscar Yesid Zapata, defensor de derechos humanos de la Fundación Sumapaz, afirma: “Al hablar del nuevo paramilitarismo, nos referimos a la sofisticación que ha hecho en los últimos 40 años. De eso habla la Defensoría del Pueblo. Son 40 años en los que estos grupos se han profesionalizado a tal punto que manejan todo lo que tiene que ver con economías sociales, economías legales y economías ilegales. Ejercen el control social, político, electoral. Dominan casi todo en el departamento, en la ciudad, en el país”.
Óscar Yesid Zapata: «Ojalá Antioquia fuera un laboratorio de paz, pero es un laboratorio de guerra»
A casusa de lo anterior, Zapata explicó que en los 125 municipios del departamento de Antioquia existe presencia de grupos armados, de corrientes paramilitares, guerrilleras y de corrientes de otro tipo, que convierten Antioquia en un laboratorio de guerra.
Además del Clan del Golfo que opera en el 90% del departamento de Antioquia, tiene presencia la denominada Oficina del Valle de Aburrá, que controla totalmente los municipios cercanos a Medellín y que se ha expandido hacia otras ciudades y departamentos. Incluso se expandieron hacia Centro y Suramérica.
Aunque el núcleo operativo del grupo paramilitar de La Oficina se encuentra en el Área Metropolitana de Medellín, mantiene influencia directa en varios municipios del Valle de Aburrá, como Medellín, Envigado, Bello e Itagüí.
Asímismo, extendió su presencia al Suroeste antioqueño, donde compite por el control territorial con grupos como el Clan del Golfo. En esta región, la confrontación entre ambas estructuras ha alterado la tranquilidad de varios municipios, afectando la vida cotidiana de sus habitantes.
De igual forma, la Corporación para la Paz y el Desarrollo Social (Corpades) denunció la presencia en el centro de Medellín del grupo criminal transnacional del Tren de Aragua.
Las trágicas cifras recientes del paramilitarismo en Antioquia
Indepaz afirma que desde la firma de los acuerdos de paz en 2016 hasta 2025, en el departamento de Antioquia fueron asesinados 239 líderes, lideresas, defensores y defensoras de derechos humanos.
Igualmente, la organización de derechos humanos señaló que 49 firmantes del acuerdo fueron asesinados entre 2016 y 2025. Además, en ese departamento ocurrieron 96 masacres que dejaron 315 víctimas en el mismo periodo de tiempo.
Paramilitarismo en expansión
Los principales grupos paramilitares que existen en Colombia son:
- Clan del Golfo (Ejército Gaitanista de Colombia – EGC-): El grupo con mayor tamaño y dominio en el país. Tiene presencia en 24 departamentos. Sus principales fuentes de financiación son el narcotráfico, la extorsión, la minería ilegal, entre otros. Mantienen una ofensiva armada para ejercer control territorial en todo el país.
- La Oficina es un grupo mafioso urbano con orígenes paramilitares. Ejercen control territorial en Medellín y el Valle de Aburrá. Se dedican al narcotráfico, microtráfico, la extorsión, el sicariato, entre otras actividades criminales.
- Los Caparros (prácticamente disueltos en 2021-2022, pero aún quedan remanentes). Son el rival histórico del Clan del Golfo en el Bajo Cauca antioqueño y el Sur de Córdoba. Gran parte de sus estructuras fueron absorbidas por el Clan del Golfo.
- Los Pachenca (o Conquistadores de la Sierra). Son principalmente fuertes en la Sierra Nevada de Santa Marta y zonas de La Guajira. También se dedican al narcotráfico, la extorsión y ejercen control territorial en las rutas al Caribe. Mantienen enfrentamientos con el Clan del Golfo y en algunos casos con las disidencias.
- Los Rastrojos (muy debilitados, pero con presencia residual en Norte de Santander y frontera con Venezuela) se dedican al narcotráfico, el contrabando y tráfico de migrantes. Sostienen disputas armadas con el ELN y el Tren de Aragua en la frontera.
- Águilas Negras son células criminales que se dedican a la intimidación, la extorsión y amenazas contra liderazgos sociales y personas dedicadas a la defensa de los derechos humanos.
- Los Espartanos y Los Costeños (en Barranquilla y el Atlántico). Bandas armadas de origen narcoparamilitar. Controlan microtráfico y extorsión en zonas urbanas. Tienen nexos con La Oficina y con carteles mexicanos.
CI FC/20/05/2025/12:00