CI.- Ernesto Roa es un reconocido líder social del Centro Oriente colombiano, quien fue víctima de un atentado a manos del grupo paramilitar conocido como las disidencias, quienes desde hace años son responsables de varios ataques contra la comunidad y las organizaciones sociales de la región.

En la noche del 22 de abril, las disidencias intentaron asesinar al líder social y campesino Ernesto Roa en el municipio de Saravena, Arauca, a escasos metros de la vivienda del reconocido líder social.

Los atacantes dispararon en varias ocasiones contra Roa, quien, tras recibir dos heridas de bala, se recupera satisfactoriamente después de recibir atención médica especializada en el hospital de Sarare, confirmó la Fundación de Derechos Humanos Joel Sierra y el medio de comunicación Trochando Sin Fronteras.

Tanto el Congreso de los Pueblos como la Joel Sierra responsabilizaron a las disidencias del atentado contra Roa.

La Fundación dijo que este atentado hace parte del proceso genocida contra el Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente colombiano.

Por su parte, el Congreso de los Pueblos dijo: “Rechazamos con todas nuestras fuerzas este hecho que se suma a la serie de atentados que han enfrentado nuestras compañeras(os) del Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente a causa de la estrategia de terror de Estado, desarrollada por una estructura paramilitar bajo la fachada de disidencias de las Farc en Arauca”.

De igual forma, varias organizaciones sociales le exigen al presidente Petro garantías para los liderazgos sociales y acciones concretas contra estos grupos paramilitares, quienes en los últimos años incrementaron sus ataques contra las comunidades.

Líder social Ernesto Roa

Ernesto Roa: Un líder social perseguido por el Estado

Roa es vocero del Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia. Además de ser uno de los fundadores, hace parte del Coordinador Nacional Agrario (CNA) y de la Asociación Nacional Campesina José Antonio Galán Zorro (ASONALCA). En todas estas organizaciones es reconocido como uno de los principales liderazgos sociales de la región.

Igualmente, es delegado a las asambleas de la Fundación de Derechos Humanos Joel Sierra y de la Empresa Comunitaria de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Saravena (ECAAAS ESP).

Además, Ernesto Roa es uno de los principales interlocutores de las organizaciones sociales con el Estado y las corporaciones transnacionales.

Debido al papel de Roa en las luchas sociales para mejorar las condiciones de vida de las comunidades, ha sufrido estigmatización, persecución, perfilamientos y hostigamientos por parte de políticos de derecha, periodistas, las disidencias y las propias autoridades colombianas.

El pasado 19 de febrero, Ernesto Roa le dijo a Colombia Informa: “Con respecto a lo que se vive en el departamento de Arauca, lo que nosotros desde el movimiento político de masas le hemos planteado y le hemos exigido al Gobierno nacional es el desmonte de las estructuras paramilitares que se hacen llamar disidencias de las Farc”.

Además, el líder campesino denunció que en Colombia se reconfiguró el paramilitarismo en los distintos territorios y reiteró:“Hemos planteado que nosotros queremos la paz, pero la paz nuestra va planteada en la superación de las necesidades que históricamente han tenido las comunidades”.

Entrevista completa a Ernesto Roa

Roa también le exigió al Gobierno que haga que las transnacionales que explotan y saquean el petróleo en el departamento paguen con la deuda social que generaron debido a esta actividad extractivista, con la cual vulneraron los derechos de las comunidades; han cometido etnocidio, ecocidio y generaron una crisis social y humanitaria por este fenómeno.

Atentado contra el edificio de las organizaciones sociales en 2022

Un genocidio sistemático contra el movimiento social

Desde hace varios años, toda la región del centro-oriente colombiano es escenario de una permanente arremetida contra el movimiento social y sus comunidades.

El reciente atentado contra el líder social Ernesto Roa es uno de muchos ataques que enfrenta el Movimiento Político de Masas Social y Popular del Centro Oriente de Colombia y que hasta ahora ha dejado un sinnúmero de líderes y lideresas sociales asesinados.

Después de ser estigmatizado por la periodista de Caracol Radio, Diana Saray, el pasado 5 de marzo de 2024 fue asesinado el líder campesino Josué Castellanos, quien murió a manos de las disidencias, un grupo paramilitar que reivindica en su nombre a las desaparecidas FARC y que, según las comunidades, tiene vínculos con las fuerzas militares.

Cifras de Indepaz señalan que, tras la firma de los acuerdos de paz en 2016, que llevaron a la desmovilización, desarme y reinserción de las FARC en Arauca, Boyacá y Casanare, fueron asesinados 90 líderes y lideresas sociales.

Líder campesino Josué Castellanos

Un genocidio histórico

Sin embargo, la violencia contra liderazgos sociales del centro-oriente colombiano es un hecho constante a lo largo de los más de 60 años del reciente conflicto social y armado que se vive en Colombia.

Un ejemplo evidente es el ocurrido durante la Caravana Humanitaria realizada en 2024, donde las comunidades conmemoraron el crimen de Estado de los líderes campesinos Leonel Goyeneche, Héctor Alirio Martínez y Jorge Prieto, quienes fueron asesinados por las fuerzas militares colombianas el 5 de agosto de 2004, durante el gobierno de Álvaro Uribe Vélez.

La sistematicidad de asesinatos, encarcelamientos y persecución de los liderazgos sociales de forma permanente es lo que llevó a diversas organizaciones sociales y defensoras de los derechos humanos, como la Fundación Joel Sierra, a denunciar la existencia de un plan sistemático y genocida contra las organizaciones de la región, que involucra al Estado colombiano, a empresas petroleras, entre otras.

Caravana Humanitaria en Caño Seco, Arauca

Disidencias son grupos paramilitares

El 19 de enero de 2022, las disidencias activaron un carro bomba contra la casa de las organizaciones sociales ubicada en Saravena, Arauca.

Durante el atentado, las disidencias asesinaron un líder social y destruyeron varias viviendas, empresas y sedes de distintas organizaciones del movimiento social campesino, indígena, LGBTIQ+, docentes, mujeres, entre otros, como el medio de comunicación Trochando sin Fronteras, así como otros medios.

Las disidencias en Arauca son lideradas por alias Antonio Medina, quien, según denuncian las comunidades y organizaciones sociales, tiene vínculos con las fuerzas militares.

Antonio Medina

De hecho, en 2023, la Revista Raya reveló una investigación periodística que confirmó que Medina era colaborador del Ejército colombiano desde el año 2009, después de que desertó de las FARC. Esto fue demostrado por la Fiscalía colombiana, de acuerdo con un documento de Justicia y Paz.

Durante una caravana humanitaria realizada por diferentes organizaciones sociales en 2022, firmantes de paz de las antiguas FARC y quienes solicitaron que su nombre no apareciera para proteger su integridad le dijeron a Colombia Informa que Antonio Medina trabajaba con las fuerzas militares desde antes del proceso de paz.

Agregaron que ni en los mejores años de las Farc en la región, jamás lograron crecer a la velocidad con la que lo hacen las disidencias. Aclararon que esto solo es posible gracias al apoyo de paramilitares y de las propias fuerzas militares, las cuales tienen alta presencia armada en la región.

Disidencias se desquitan con la población civil

Las disidencias han realizado múltiples amenazas contra líderes y lideresas sociales en Arauca. Dichas amenazas son precedidas por varios atentados y el asesinato de liderazgos sociales y varios crímenes contra las comunidades.

A esto se suman las denuncias realizadas por las comunidades, quienes responsabilizan a las disidencias de ser los principales responsables de reclutar a la fuerza a menores de edad.

En 2023, un menor de edad denunció que fue reclutado por las fuerzas militares, quienes lo vincularon a las disidencias.

Desde el año 2022 se incrementaron en Arauca los enfrentamientos armados entre el ELN y las disidencias lideradas por Omar Pardo (alias Antonio Medina), quien decidió atacar a las comunidades y organizaciones como forma de retaliación, debido a varias derrotas que ese grupo paramilitar habría sufrido a manos del grupo insurgente del ELN.

CI FC/23/04/2025/12:40