La conmemoración histórica del primero de mayo en Cali convocó aproximadamente a 10.000 marchantes pertenecientes a sindicatos, organizaciones sociales y políticas.

El recorrido realizado por la marcha vinculó directamente a los sectores sociales, ya que esta vez la movilización atravesó varios barrios populares.

Entre las principales reivindicaciones se escucharon el rechazo al Plan Nacional de Desarrollo del presidente Juan Manuel Santos, la ratificación del paro nacional que adelantan los profesores y el apoyo a los procesos de paz entre el gobierno y las insurgencias. Como un llamado común, todas las organizaciones se refirieron a la necesidad de unificar las diferentes luchas que avanzan en el país.

La masividad de esta conmemoración año tras año deja ver la permanencia de la resistencia de diversos sectores frente a las políticas neoliberales del gobierno, que atizan numerosos conflictos económicos políticos, y sociales. En Cali, marcharon hasta los bomberos, los trabajadores de la seguridad privada, los jubilados y pensionados.