24 jul. CI.- Hoy empieza el Tercer Ciclo de negociaciones entre el Ejército de Liberación Nacional –ELN- y el Gobierno de Juan Manuel Santos. Esta ronda de diálogos, que tiene lugar en Ecuador, estará enfatizada en lograr un acuerdo para garantizar el cese al fuego bilateral. La discusión de este punto coincide con la visita del Papa Francisco, máxima autoridad de la Iglesia Católica, a Colombia. Se espera que tal acontecimiento impulse y fotalezca la construcción de paz en el país.

El pasado 4 de julio el Ejército de Liberación Nacional cumplió 53 años de vida política y militar. Más de medio siglo ha transcurrido desde que un pequeño grupo de hombres dirigidos por Fabio Vásquez Castaño emprendiera la primera marcha guerrillera desde San Vicente de Chucurí en el Departamento de Santander.

En su origen se mezclan diferentes experiencias previas de luchas y conflictos colombianos: las guerrillas liberales de la época de La Violencia, la organización obrera y sindical, la lucha estudiantil y la campesina. Todo esto bajo la influencia de la Revolución Cubana le imprimió un sello particular a dicha organización. Luego, con la figura del sacerdote Camilo Torres Restrepo, sella su identidad.

Varias décadas después, en medio de los diálogos adelantados con el Gobierno Santos, se abre la posibilidad de consolidar un cese bilateral al fuego que permita parar la guerra y facilitar escenarios de participación política de la sociedad colombiana para la construcción de paz. Todo esto de acuerdo a la metodología pactada para la mesa de negociaciones.

Hasta hoy, el diálogo se ha desarrollado en medio de la guerra y, aunque el ELN desde el principio ha insistido en un cese al fuego bilateral, solo al final del ciclo pasado el Gobierno expresó su voluntad de avanzar hacia ese punto.

Sobre el punto específico del cese al fuego acordaron que “una mesa especializada trabajará los temas atinentes al punto 5F de la agenda sobre Acciones y Dinámicas Humanitarias, que beneficien a la población civil alejándola del conflicto. Dicha comisión le prestará especial atención a estudiar si las condiciones están dadas para avanzar hacia un cese al fuego bilateral acompañado de un cese de hostilidades”.

El llamado a concertar el Cese al fuego ha sido también impulsado por diferentes sectores de la sociedad como la Iglesia Católica, Mesa Social Para la Paz y diferentes organizaciones y movimientos sociales. Lo cual resulta particularmente significativo por la influencia cristiana y de la Teología de la Liberación que ha tenido durante su historia el ELN. Esta organización ha contado con la participación de múltiples religiosos, aparte de Camilo Torres, como Domingo Laín y Manuel Pérez.

Aunque las tensiones alrededor del cese al fuego y las exigencias mutuas ya empezaron, la disposición para discutir este tema es un importante paso para Colombia y la construcción de una paz integral.

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