10 oct. CI.- El 3 octubre, en la Universidad Andina de Quito, Ecuador, se realizó el lanzamiento del libro Machuca. Este cuenta la tragedia ocurrida el 18 de octubre de 1998 en dicho Corregimiento del municipio de Segovia, Antioquia.

En el lanzamiento del libro estuvieron como panelistas José Humberto Torres, Vicepresidente de la Fundación Comité de Solidaridad con los Presos Políticos -CSPP-; Gearóid Ó Loingsigh, periodista irlandés y autor del libro; y Pablo Beltrán, Comandante del Ejército de Liberación Nacional -ELN.

El texto examina los hechos ocurridos en el Corregimiento de Machuca a través de una exhaustiva investigación. Es un trabajo de memoria que permite a los lectores sumergirse en las dinámicas políticas, sociales y territoriales entorno a la violencia en el Noreste Antioqueño.

Esta investigación, según José Humberto Torres, es un gran esfuerzo que permite develar los diversos factores que se conjugaban en ese momento en la región. Permite mirar lo que aconteció en Machuca en contexto y comprender que en esa región no solo había presencia del ELN, también estaban paramilitares, fuerzas estatales y empresas petroleras.

José Humberto resalta cómo el autor del libro se sumerge en las discusiones en torno a la explotación de los recursos naturales y la relación de las actividades minero energéticas con la violencia, la represión, la ejecución de las personas que se oponen a este tipo de actividades. Se revisan específicamente la relación de la industria petrolera con el exterminio de los pueblos indígenas, con el paramilitarismo y la soberanía territorial.

Al finalizar su intervención, el Vicepresidente de la CSPP invitó a la gente a leer el libro por ser un gran aporte a la construcción de la memoria histórica del conflicto armado colombiano, al comprender el problema por la causa y no solamente por las consecuencias.

Gearóid Ó Loingsigh, autor de libro, resaltó por su parte el tema de la responsabilidad. Su investigación, le permite afirmar que la responsabilidad consta de diferentes factores, por lo que esta no solo recae sobre la organización guerrillera.

Como norma general, las empresas reconocen que los oleoductos se rompen y se tornan peligrosos para las comunidades, por lo que deben de tener planes de contingencia. Por otro lado, el papel del Estado se denota tanto en la provisión de permisos para la explotación en zonas donde la población puede resultar vulnerada como en la atención a las víctimas.

Sobre los hechos ocurridos, el periodista afirma que “cuando estalla el crudo, Ocensa, demora dos horas y media en confirmar el incendio. La ubicación del Oleoducto estaba a más de dos horas y media de la atención de los diferentes equipos de emergencias, ambulancia y bomberos”.

Ó Loingsigh confirmó en su investigación que el Estado colombiano se negó a participar en una comisión internacional para esclarecer los hechos, una comisión que el ELN había solicitado.

Pablo Beltrán, Jefe de la Delegación de Paz del ELN, saludó el espacio que facilitó la Universidad Andina de Quito como un espacio en pro de la paz y del esclarecimiento de la verdad.

El Comandante del ELN hizo explícita la importancia del trabajo del autor del libro como aporte a los derechos de las víctimas, por lo mismo afirmó que si bien su organización estaba de acuerdo con algunos argumentos y con otros no, de lo que se trataba era de esclarecer la verdad con miras a la reparación y garantías de no repetición.

Asimismo, Pablo Beltrán resaltó que si no hay verdad no hay justicia social para las víctimas. A nombre del ELN dejó constancia del compromiso que debe haber por la verdad y la asunción de responsabilidades por todas las partes. “Estamos acá como un paso en la construcción de la verdad, como un paso en la asunción de responsabilidades”, afirmó.

Sobre la oportunidad de estar declaró “que escuchen al ELN es lo de menos. ¿Por qué no escuchan a la gente de las regiones donde están esos recursos? ¿Por qué están tratando de echar atrás las consultas de los municipios donde mayoritariamente se han opuesto a la explotación minero energética? ¿Dónde queda la soberanía popular? No queremos que la nueva política minero energética sea la del ELN, queremos que escuchen a la gente, que la gente decida”.

CI DA/PC/10/10/17/07:00