11 may. CI- Cuatro líderes campesinos fueron capturados por el Ejército en el municipio de Anorí, Antioquia, el pasado jueves 9 de mayo. A pesar de que en ningún momento se explicó el motivo de las capturas y de que hubo irregularidades en las mismas, dos de ellos aún continúan detenidos. 

La vereda Cruces de Anorí amaneció con el sonido de un helicóptero que aterrizó a las 9:00 am el jueves, tripulado por varios hombres armados que se identificaron como miembros del Ejército Nacional, de la Sijin y del CTI. Al bajar, procedieron con la captura de cuatro campesinos que lideran procesos comunitarios en el territorio.

Detuvieron a Luz Estela Fernández, presidenta de la Junta de Acción Comunal -JAC- de la vereda; a Dairo de Jesús Valdés, directivo del Comité de Obras en la vereda Concha Bajo; a Rodrigo de Jesús Arango, líder reconocido del municipio y a Ferney de Jesús Calle, miembro de la JAC de Concha Bajo.

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Alarmada, la comunidad pidió que se explicaran los motivos de las capturas, pero la Fuerza Pública no respondió y se llevó a los dirigentes en el helicóptero.

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El día de ayer se realizaron las audiencias preliminares en las que Dairo de Jesús y Rodrigo de Jesús son dejados en libertad, debido a la ilegalidad de la captura del primero y falta de motivos en el segundo caso. Por otro lado, los argumentos de la Fiscalía para mantener detenidos a Luz Estela y Ferney de Jesús estuvieron ligados a la criminalización y estigmatización de los líderes. 

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«En Anorí todos los habitantes son muy afines a los grupos guerrilleros» fue una de las afirmaciónes que realizó la Fiscalía y que pone en peligro la vida, no solamente de los detenidos, sino de toda la comunidad.

Estos hechos evidencian la persecución y estigmatización del movimiento social del Nordeste antioqueño, que además se replica en el resto de Colombia. Por este motivo miles de personas de diversas regiones del país se reunieron desde el 28 de abril en el marco del Refugio Humanitario en Bogotá; allí se denunció el genocidio de líderes y lideresas que se está llevando a cabo, así como la persecución y judicialización de quienes defienden sus territorios.

En un comunicado las organizaciones sociales de Anorí exigen que se esclarezcan los hechos y que se la Fiscalía se retracte de las afirmaciones realizadas a la comunidad que ponen en peligro su vida.

En menos de un año ya se han presentado numerosos casos de falsos positivos judiciales en distintas regiones del país, dejando en evidencia a un gobierno cuyas políticas se basan en la estigmatización y persecusión del movimiento social, así como de los líderes y lideresas que trabajan por el bienestar de sus comunidades y territorios.

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CI ND/ND/11/05/19/13:00