16 jun, CI.- Luego de que una decisión de la Corte Constitucional reviviera las curules especiales y transitorias la semana pasada, el Departamento administrativo de la Presidencia de la República -DAPRE- intentó revertir la decisión que le daría la oportunidad de participar en la Cámara de Representantes a 16 víctimas del conflicto armado provenientes de las zonas vulnerables del país. 

Estas curules están contempladas en el segundo punto del Acuerdo de Paz con el cual se propone la creación de 16 escaños especiales y transitorios (durante dos periodos legislativos) para la representación de las víctimas de 170 municipios priorizados como zonas de conflicto álgido y abandono institucional. 

Esta medida tiene como objetivo “garantizar una mejor integración de zonas especialmente afectadas por el conflicto, el abandono y la débil presencia institucional, y una mayor inclusión y representación política de estas poblaciones y de sus derechos políticos, económicos, sociales, culturales y ambientales, y también como una medida de reparación y de construcción de la paz”. Además, están diseñadas para que las personas inscritas y elegidas sean víctimas respaldadas por organizaciones sociales, de víctimas, campesinas, de mujeres, entre otras, pero que no pertenezcan a los partidos políticos constituidos.

El proyecto había sido archivado antes de las elecciones de 2018 luego de que supuestamente no alcanzara los votos necesarios para su aprobación, a pesar de que cincuenta de los 99 votos fueron a favor. Entre los senadores que votaron en contra del proyecto estuvo Álvaro Uribe Vélez y los demás legisladores de su partido político. 

Algunos de los argumentos para deslegitimar el proyecto estaban relacionados con que que las curules supuestamente serían ocupadas por guerrilleros desmovilizados (a pesar de que esto no se contemplaba en el proyecto de ley), o que las votaciones serían cooptadas por grupos ilegales. 

Este discurso, que además estuvo secundado por el presidente Iván Duque, fue utilizado en marzo de 2020 para proponer curules para “las verdaderas víctimas”, según aseguró Duque. En esta propuesta los escaños estarían supeditados a los partidos tradicionales y a las circunscripciones departamentales de la Cámara de Representantes, dejando por fuera a las organizaciones de la sociedad civil y de víctimas.

Recientemente las curules fueron revividas por una decisión de la Corte Constitucional que determinó que los votos alcanzados en la primera discusión sí fueron suficientes para su implementación. Además, ordenó al Congreso preparar el proyecto de ley para la difusión presidencial, y a la Registraduría preparar los trámites correspondientes para la inscripción y elección de los candidatos.

Sin embargo, a principios de junio el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República -Dapre- interpuso un recurso de nulidad en el que argumentó supuestas fallas en el procedimiento, con el objetivo de revertir la decisión de la Corte. 

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Días después este recurso de nulidad fue retirado por Emilio Archila, Consejero Presidencial para Estabilización y Consolidación, luego de fuertes críticas por parte de representantes de la oposición y por la opinión pública. 

Figuras públicas y políticas como los senadores Roy Barreras, Feliciano Valencia e Iván Cepeda celebraron el logro de las curules, así como integrantes de organizaciones civiles que han acompañado la disputa por la participación política desde el 2017. 

Aunque el recurso fue retirado fue evidente la poca importancia que el Gobierno y su partido le brinda a las víctimas en los escenarios de discusión y decisión. Un ejemplo fue la reciente negativa por parte de congresistas para escuchar a las víctimas durante la ceremonia de ascenso del general Vargas, denunciado por la violencia perpetrada por la policía en el marco del presente Paro Nacional.

A pesar de que la Corte revivió las curules, el abogado Juan Manuel Charry también había presentado otro recurso de nulidad que aún podría ponerlas en riesgo. Según Ángela María Robledo, “el Gobierno retira la acción de nulidad sobre las Curules de la Paz no porque su deseo sea que esas curules existan, sino porque ya hay otra acción de nulidad en curso que interpreta el deseo manifiesto del Gobierno y les ahorra el desgaste público ante el país”.

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CI YA/ND/16/06/2021/11:00