16 sep. CI.- Entre el Sur de Bolívar y el Catatumbo está el departamento del César; el río Magdalena también va por el medio, separando dos regiones que han sangrado el conflicto y que actualmente, ante la grave situación de derechos humanos, resisten y permanecen en sus territorios.

Dos lugares en los que abundan los minerales y las fuentes hídricas; los municipios del Sur de Bolívar -en donde, además, está ubicada la Serranía de San Lucas-, así como los del Catatumbo, vivenciaron unas de las escenas más crudas de la guerra. Asimismo, han conocido a un Estado militar, que no ha hecho más presencia que con las armas y las botas de los soldados.

Al tiempo, la violencia y la abundancia de los territorios han forjado un camino histórico de luchas y procesos organizativos que han resistido al dolor construyendo vida y resistencia. «Decidimos retornar al territorio, recuperar el tejido social, reconstruirlo y apostar por la permanencia con vida digna», afirma el Comité de Integración Social del Catatumbo -Cisca-, un proceso que se ha construido desde el año 2004 en esta región.

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Sin embargo, la intensificación de los enfrentamientos armados, la militarización y violación sistemática de derechos humanos, son elementos que actualmente marcan la cotidianidad, tanto en el Sur de Bolívar como en el Catatumbo.

José Dolores Sánchez en el Sur de Bolívar y Dimar Torres en el Catatumbo , fueron dos casos de falsos positivos que se presentaron en marzo y abril de este año, respectivamente; ambos sucedieron en un contexto de incremento del pie de fuerza por parte del ejército. La alta presencia de militares también ha contribuido al incremento de los enfrentamientos entre el ejército y el ELN -Sur de Bolívar-; y entre el ejército, el EPL y el ELN -Catatumbo-.

Asimismo, los hostigamientos, persecusiones y amenazas por parte de la Fuerza Pública hacia las comunidades han sido denuncias reiterativas por parte de las mismas. El hecho más reciente ocurrió el 15 de julio en el municipio de Morales, Sur de Bolívar, cuando nueve campesinos fueron capturados de manera irregular por la Fuerza de Tarea Marte del ejército.

Con el fin de verificar las situaciones de derechos humanos en ambas regiones, se realizará una Misión Humanitaria con participación internacional durante la semana del 16 al 22 de septiembre. Desde Micoahumado hasta Filo Gringo, organizaciones internacionales y nacionales visitarán se encontrarán con las comunidades y verificaran la situación que viven los territorios actualmente.

La Misión finalizará en Bogotá, donde se compartirá con otras organizaciones sociales y la prensa, los hechos evidenciados y documentados durante el recorrido.

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CI ND/ND/16/09/2019/12:00