Pobladores de Argelia, al sur del Cauca, denunciaron que efectivos del ejército y la policía nacional irrumpieron de forma violenta desde la mañana del pasado 18 de noviembre, argumentando el inicio de la erradicación de cultivos de coca. La comunidad señaló que el grupo de más de 2000 militares, agentes y erradicadores coparon casas y predios de la zona, lo que elevó el descontento de los habitantes que no están de acuerdo con la presencia de actores armados en sus territorios. Las acciones militares dejan como saldo una persona muerta y siete heridos.
Se mantiene la tensión en el sur del Cauca. La llegada de 35 vehículos que movilizaban a integrantes de las fuerzas armadas, el sobrevuelo de helicópteros y el copamiento militar de las veredas que rodean el municipio de Argelia alteró la tranquilidad de esta comunidad. Para Jhonattan Patiño de la Asociación Campesina de Argelia, estas acciones han generado choques entre la población campesina y la fuerza pública.
“El reporte muertos y heridos causa mucha preocupación; tanto por la situación de los campesinos, como por el escenario en el marco del proceso de paz que se adelanta en La Habana, el cese al fuego unilateral decretado por las Farc y la suspensión de bombardeos que informó el gobierno. Algunos medios de comunicación empezaron a informar de enfrentamientos entre el ejército y la guerrilla lo cual supondría la violación del cese al fuego que podría conllevar al rompimiento de los diálogos de paz, una situación catastrófica para el país”, aseguró Patiño quien es además diputado electo para el Cauca.
En la tarde del jueves 19 de noviembre, una comisión humanitaria que se desplazó hasta la zona confirmó la muerte del campesino Miller Bermeo Acosta a causa de los impactos de arma de fuego de los militares y seis personas heridas por impactos de proyectiles de arma de fuego. Los heridos son: John Males Gómez (fractura en el fémur de su pierna derecha), José Wilson Yonda (disparo en ambas piernas), Eduard Arvey Jaramillo (disparo en ambas piernas), Carlos Andrés Ordoñez (amputación en un dedo), José Iván Mosquera (herida en un glúteo) y Humberto Cadena Morales (disparo de bala de goma en la cabeza).
La Comisión Nacional de Derechos Humanos del Movimiento Marcha Patriótica advirtió que lo que se vive en Argelia es una grave crisis humanitaria. “De manera indiscriminada y desde helicópteros, los militares han disparado contra los campesinos quienes catalogan estos hechos como una estrategia estatal que pretende utilizar como argumento la erradicación de cultivos de coca, cuando la verdadera intención es la de copar militarmente el territorio y facilitar escenarios para que sean cometidas graves violaciones a los Derechos Humanos, por actores tanto oficiales como paraestatales”, denunció la comisión.
Según Jhonattan Patiño “los militares argumentan que se encuentran en la cuarta fase de un proceso de erradicación de cultivos de coca. Ante esto, los campesinos han manifestado voluntad de diálogo y negociación. Las comunidades quieren concertar una propuesta de sustitución gradual de cultivos que brinde garantías para las familias. Sin embargo el gobierno ha mantenido los planes de erradicación forzada, que conllevan a situaciones tan graves como las que hoy se viven en Argelia”.
Ante esta situación, organizaciones sociales y plataformas para la defensa de los derechos humanos denunciaron los atropellos y exigieron plenas garantías de los derechos fundamentales a la vida e integridad de los habitantes de Argelia. “Instamos a las instituciones responsables de la promoción de los derechos humanos a cumplir con sus deberes constitucionales y legales y a realizar un acompañamiento y gestión humanitaria eficaz que permita detener el accionar indiscriminado de las fuerzas militares”, indicó la Marcha Patriótica por medio de su Comisión de Derechos Humanos.
