24 nov. CI.- En una ceremonia sobria, con pocos asistentes y muy cerca del Capitolio, se llevó a cabo la firma protocoloria del Acuerdo Final entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -FARC- y el Gobierno de Juan Manuel Santos.

Mientras en el Teatro Colón un grupo de 700 delegados se dispuso para acompañar a las delegaciones en su tarea, la Plaza de Bolívar recibió una concentración de ciudadanos que celebró que, tras la victoria del No en el Plebiscito del 2 de octubre y varios obstáculos más, se lograra la firma de un documento definitivo que refrendará el Congreso de la República.

Refrendación

Esta misma tarde, un grupo de congresistas presentó el documento (proposición) a través de la cual se convoca a las sesiones que darán como resultado al refrendación del acuerdo:

En esa ruta, el senador Iván Cepeda interpeló a la bancada del Centro Democrático que se opuso a la firma. En la plenaria del Senado, Cepeda señaló: «En este acuerdo está incluída una gran mayoría de sectores del país. La cúpula de las Fuerzas Armadas manifestó su respaldo, sectores que votaron por el NO fueron recogidos y ustedes deben respetar eso».

Cuestionó al expresidente Álvaro Uribe por sus declaraciones a propósito de la ilegitimidad del Congreso, lo que haría improcedente la refrendación por esta vía: «Le recuerdo que en su gobierno usted le pedía a este mismo órgano que aprobara pronto sus leyes. En ese momento no era incapaz de hacerlo, ¿por qué para la refrendación sí?», señaló.

Agregó que con este episodio se pretende poner fin al ciclo de violencia de los últimos 50 años y que «los únicos a los que no les sirve este acuerdo es a quienes esperan que el paramilitarismo continúe».

En la Plaza

Si bien la convocatoria no tuvo la asistencia masiva de otros momentos, las organizaciones que hicieron presencia en la Plaza de Bolívar expresaron su firme convicción con la paz, aunque con exigencias concretas frente a la necesidad de que paren los aseisnatos a líderes sociales y defensores de derechos humanos.

Para Andrés Camacho, vocero de la Marcha Patriótica, este hecho abre la posibilidad de cerrar un capítulo doloroso de la historia del país en la que hay muchas historias y verdades por contar. «Este acuerdo marca el derrotero para la refrendación y la implementación, procesos que deben desarrollar todo lo pactado, en términos de justicia, de participación política, de seguridad y protección a los dirigentes de organizaciones políticas y sociales, sobre todo en un momento en el cual se está desatando una arremetida paramilitar a lo largo y ancho del país que puede generar contradicciones y riesgos a la implementación», declaró.

Señaló finalmente que «es importante que en el corto plazo se desarrollen las medidas consignadas en el acuerdo para ejercer la política con garantías».

Así se vivió la firma en la Plaza:


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