El pasado 21 de Noviembre, los familiares de las personas detenidas marcharon por las principales calles de Cúcuta exigiendo al gobierno mejoras en las condiciones de vida, especialmente contra el hacinamiento que viven las cárceles de esa ciudad.

 

En la mañana del pasado viernes, los familiares de los presos de la cárcel Modelo se concentraron en la redoma del terminal de transportes. En esta ocasión, cerca de 200 personas provenientes del Catatumbo acompañaron la acción de protesta que culminó en la Gobernación y el parque Santander, en donde se encuentra la Alcaldía de la ciudad. Allí, los mamifestantes exigieron al alcalde Donamaris Paris Lobo más atención a los internos.

Según una familiar de un preso, las condiciones son muy precarias para la población detenida: «la comida es muy mala, la atención de salud es pésima, por ejemplo, mi esposo necesita una operación y no se la han realizado en los dos años que se lleva preso, de paso las medicinas que se llevan no las de las dejan entrar».

Otra de las problemáticas que se presentan en las cárceles de Cúcuta es la demora en las audiencias que pueden duran hasta seis meses. Eilen Rojas, integrante de la Asociación de Familiares y Amigos de los Internos de la Cárcel de Cúcuta (Asofamintercuc) expresó a Colombia Informa: “Hoy los familiares nos hemos unido para sensibilizar a la comunidad cucuteña, plantearles que en la cárcel hay unos seres humanos en condiciones infrahumanas y que están olvidados por el Estado”.

Rojas agregó que la cárcel de Cúcuta está diseñada para 2700 internos y que actualmente la habitan 4000. El hacinamiento es tal que algunos internos duermen en la tarde para que otros lo puedan hacer en la noche. El paro judicial también ha afectado a los internos de Cúcuta. No se han podido realizar los procesos de legalidad para otorgar la libertad a quienes ya cumplieron su condena, lo que agrava la situación de hacinamiento. A esto se suma la falta de médicos, solo hay uno en el turno de la noche para atender enfermedades como la tuberculosis.

Finalmente, los familiares denunciaron los malos tratos de los guardias en las visitas. Según ellos, no les dejan entrar la comida para sus seres queridos, además son tratados con insultos. La situación se presenta también con los internos y la cárcel de mujeres en la que hace tiempo se ha denunciado la vulneración de los derechos humanos que el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) comete con las detenidas: “Eso demuestra la política de represión de esa institución que está ligada a la del gobierno”, aseguró un participante de la movilización.

La actividad terminó con actos culturales y el anuncio de un paro de los internos de no encontrar salida a sus exigencias. Además, Asofamintercuc hizo un llamado al Gobierno para que atienda inmediatamente la situación carcelaria.