12 nov, CI.- La Caravana Humanitaria “Por la Vida y la Defensa del Territorio en el Cañón del Río Micay”, que desde el 30 de octubre fue recibida de manera emotiva por las comunidades del municipio de Argelia (Cauca), culminó su recorrido de manera exitosa. Organizaciones sociales rechazaron actos de violencia ocurridos en el territorio para amedrentar a la Caravana; así como los señalamientos y la estigmatización que elAlto Consejero para el Posconflicto, Emilio Archila, realizó contra esta.

Este gran esfuerzo humanitario de organizaciones sociales que se movilizaron en medio de la pandemia aún vigente para solidarizarse con las comunidades más azotadas por el conflicto armado en los últimos tiempos; fue visto por el Estado como una “politiquería”, según afirmó el Consejero Archila. Sin embargo, a pesar de las acciones violentas que los grupos armados presentes en el territorio también realizaron contra la Caravana; esta consiguió visitar el Municipio Argelia y los corregimientos El Mango y El Plateado.

“Cuando se visita este territorio se desmiente totalmente la versión de este señor que, de manera malvada ,quiere esconder -como todo este Estado lo está haciendo- lo que está pasando en esa ruralidad, allá donde el Estado ni siquiera conoce los territorios”, aseguró Magaly Pino, integrante del Equipo Nacional de Derechos Humanos del Congreso de los Pueblos.

“Vamos a seguir haciendo estas prácticas que los grandes medios de comunicación no hablan, no les conviene, ni a los grandes poderes económico de este país”, continuó Pino.

También puede leer: Ya está en Argelia (Cauca) la Caravana Humanitaria

De igual forma, se logró conocer de manera directa el abandono, el desgobierno y el genocidio existente en el territorio. Allí las reglas de juego en convivencia, en lo económico y lo cultural las imponen los actores armados, generando un riesgo para los líderes, organizaciones sociales y excombatientes que, en medio de este panorama, hacen su trabajo comunitario y defienden los Derechos Humanos.

La Caravana percibió el miedo de sus habitantes para hablar, para participar, para denunciar, para contar la realidad que se vive en el territorio; y todo esto se refleja en el silencio que instaura la guerra impuesta y en el aislamiento.

“Se hizo el llamado y se envió el mensaje político a los grupos armados que tienen azotada a la región, para que se respete la vida, para que se deje de asesinar y enlutar familias, así como también para que se deje de reclutar forzosamente. Logramos manifestar que las comunidades no están solas, que fuerzas sociales y políticas de carácter regional, nacional e internacional mantendrán el acompañamiento y observación sobre la violencia que se ejerza en contra de los líderes, excombatientes y comunidad en general”, manifestaron las organizaciones sociales participantes.

El arte y la cultura se convirtieron en el medio ideal para llegar a las comunidades, en especial a la niñez y la juventud que, a pesar del temor, salieron a recibir a la Caravana con gran alegría.

Finalmente, la Caravana se despidió del Cañón del Micay reafirmando las siguientes exigencias:

  • La implementación integral de los Acuerdos de Paz firmados con las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -FARC- y de reanudar los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional -ELN.
  • De manera urgente brindar garantías y protección a los líderes sociales, sus organizaciones y a los excombatientes.
  • Hacer presencia en toda la región del Cañón del Micay con inversión social y no solo presencia armada.
  • Exigirle al Gobierno, en cabeza del Alto Consejero para la Estabilización Emilio Archila, pedir disculpas públicas a las organizaciones participantes por las declaraciones estigmatizantes y tendenciosas contra la Caravana Humanitaria.
  • Iniciar un proceso de audiencia de control político en el Congreso de la República con participación de Alcaldes locales y comunidades, para detallar las problemáticas de la región, desarrollar propuestas para la solución y que las autoridades del Estado respondan por qué no se brindan garantías para la vida y la permanencia en territorio y por el contrario cada día se incrementan el número de masacres y asesinatos selectivos.

CI JO/PC/11/11/2020/18:00