28 feb CI.- Ayer en la tarde cientos estudiantes se congregaron en la Facultad de Sociología de la Universidad Nacional de Colombia para exigir la libertad de su compañero Mateo Gutiérrez. Luego de hacer un plantón en la Calle 26, en compañía de Aracely León Medina y Omar Gutiérrez Lemus, los estudiantes insistieron en comprobar su inocencia y hablaron sobre quién es y qué ha pasado con Mateo desde su detención.

El viernes 23 de febrero fue detenido Mateo Gutiérrez, un joven de 20 años de edad que actualmente estudia en la Universidad Nacional de Colombia. La Fiscalía General de la Nación lo acusa de ser el responsable de los últimos atentados en la ciudad de Bogotá, 30 desde el año 2015, que han dejado la sensación de inseguridad en la capital del país y un ambiente de ilegitimidad en las instituciones del Estado. A Gutiérrez se le acusa de ser el responsable de la explosión del 22 de febrero, la cual dejó un policía muerto y 26 más heridos.

La Fiscalía le imputó a Gutiérrez los delitos de terrorismo, porte ilegal de armas, hurto y concierto para delinquir por hechos que ocurrieron el 18 de septiembre de 2015. Según la versión de la Fiscalía, Mateo y otros estudiantes amordazaron a un menor de edad, robaron su celular y supuestamente dijeron que le iban a poner dos petardos panfletarios. Este hecho estaría relacionado con un petardo panfletario que estalló el mismo día en la carrera 16 con calle 76, cargado de papeles alusivos al grupo denominado ´Movimiento Revolucionario del Pueblo -MRP-´.

Dudas e inconsistencias

Por un lado está el tratamiento en los medios de comunicación, y por otro las pruebas que la Fiscalía no ha mostrado para probar su culpabilidad. El testigo de los hechos con el menor de edad y su celular dijo, año y medio después del hecho, que el responsable era un chico moreno con pelo rubio y una cola de caballo, y Mateo es blanco con cabello oscuro.

Tras las últimas explosiones en Bogotá, como la del 22 de febrero, la Fiscalía y la fuerza pública se han visto obligadas a presentar responsables. Esta presión, como en otras ocasiones, ha resultado en falsos positivos judiciales. Mateo sería el caso más reciente.

Así recordó una de sus compañeras el ser humano que es Mateo.

La historia se repite

El caso de Mateo Gutiérrez es muy parecido al caso de los trece estudiantes jóvenes que fueron detenidos el 8 de julio de 2015, acusados de pertenecer al Ejército de Liberación Nacional -ELN-. Aquellas detenciones fueron transmitidas en todas los canales de comunicación masiva con imágenes de helicópteros, policías acordonando barrios e ingresando a la fuerza a las residencias de esas 13 personas, y al presidente Juan Manuel Santos dando el parte de victoria contra la insurgencia.

Los responsables de los atentados en las instalaciones del fondo de pensiones y cesantías Porvenir nunca fueron capturados, pero la fuerza pública respondió con falsos resultados. Días después en las audiencias realizadas en los juzgados de Paloquemao, y gracias al apoyo y la movilización de compañeros durante semanas, fue claro que estas trece personas, la mayoría estudiantes de universidades públicas, como Mateo, eran inocentes de esos atentados.

CI ZP/OB/JA/28/02/17/17:00