4 abr. CI.- Julio César González, caricaturista del periódico El Tiempo que firma sus obras como “Matador”, ha sido amenazado de muerte y por esa razón anunció su retiro de las redes sociales. Dichas amenazas provenían de algunos seguidores y miembros del partido Centro Democrático.

“Matador es un canalla que falta nos hace Castaño para callarlo”, se lee en el perfil de Ariel Ortega Martínez, el hombre que desde su cuenta de esa red social amenazó al artista y quien asegura ser abogado y agente de viajes, y que cerró su perfil en las últimas horas.

Pero el de Matador no es el único trino agresivo de Ortega. “Ojalá viviera Carlos Castaño para que a esta mamerta resentida, miliciana, le enseñe a respetar o la mande a mejor vida”, escribió contra la bloguera María Antonia de la Torre. Y en su momento también dijo, refiriéndose al columnista de la Revista Semana Daniel Samper Ospina, que el grupo paramilitar conocido como Autodefensas Unidas de Colombia -AUC- “hacían falta para callarlo”.

Días atrás uno de los abogados quien es también miembro del partido ultraderechista Centro Democrático interpuso una tutela contra el artista por la obra llamada “Duque reflexiona” pues el querellante la consideró ofensiva. La Jueza Hilda María Saffon falló a favor de Matador y así también a favor de la libre expresión política.

¿Cuál ha sido la respuesta del Centro Democrático y del Gobierno ante estos sucesos? El partido encabezado por el expresidente Álvaro Uribe Vélez expulsó Ortega Martínez de sus filas, el Ministro del Interior dijo que la justicia caería contra quienes usen las tecnologías para intimidar a otros, y el Presidente Santos aseguró en un trino que: “Nada justifica el odio y la venganza. La libertad de expresión es sagrada y mucho más si se hace con humor. Defendámosla”.

Sin embargo, estas son solo las muestras cotidianas de la política de terror y odio hacia lo diferente que los centros del poder promueven en Colombia. A pesar de que las caricaturas de Matador que han molestado a algunos militantes del uribismo siguen la línea editorial del mencionado periódico -uno de los medios tradicionales del país y que, por lo tanto, mantiene una línea política oficial-, este es otro de los casos donde se demuestra que la libertad de expresión en Colombia está muy lejos de ser un derecho.

Tras el anuncio del caricaturista, las redes sociales se llenaron de sus obras como muestra de solidaridad con él y como defensa al pensamiento libre. Siguiendo ese mismo espíritu, Colombia Informa reproduce algunas de sus obras.

CI SL y PC/PC/04/04/18/13:10