15 feb. CI- Superando los obstáculos que dispusieron algunos habitantes de la zona en el camino, un caluroso día recibió a las más de mil personas que viajaron desde diferentes puntos del país a recordar el legado de Camilo Torres. Una celebración ecuménica, actos culturales y una ofrenda floral hicieron parte del evento que contó con el respaldo de los congresistas Iván Cepeda y Ángela María Robledo.

El evento fue impulsado por varias organizaciones que pasaron cerca de un año planificando la conmemoración del cincuentenario de la caída del cura, símbolo de la unidad nacional.

Fueron esas organizaciones las que alertaron por los que llamaron «irresponsables» señalamientos protagonizados por líderes de extrema derecha de la región.

Según Rommel Durán, abogado e integrante del Equipo Jurídico Pueblos, «éstas personas encontraban el acto religioso como una amenaza para su dominio, por lo tanto señalaron erradamente que la peregrinación fue un evento organizado por el Ejército de Liberación Nacional -ELN- con ayuda de Juan Manuel Santos».

A pesar de amenazas permanentes, las festividades iniciaron en Bucaramanga el 12 de febrero con los foros presididos por los sacerdotes Javier Giraldo y Gustavo Pérez, quienes recordaron el legado de Camilo Torres porque, según indicó uno de los organizadores del evento, Hernando Hernández, «hacer memoria es revivir la historia y construir escenarios de paz».

Cultura para el recuerdo

La conmemoración tuvo diferentes manifestaciones, entre las más destacadas, un concierto en medio del cual se estrenó «Tras el rastro de Camilo», documental realizado por Diego Briceño Orduz.

Las jornadas culturales se repitieron en distintas ciudades, universidades y barrios. La máxima fue divulgar la figura de Camilo Torres como un sujeto integral, de acuerdo a las declaraciones del sacerdote Gustavo Pérez: «Camilo Integral, desde su integración al seminario hasta su caída sangrienta, dejó una huella en el continente y dedicó su vida al amor eficaz. Crear el estudio sociológico en la Universidad, llevar la universidad al barrio, ejercer el cristianismo como una practica de opción por los desfavorecidos, ejercer la sociología como una forma de vivir en Cristo, todo eso consolida en él la integralidad».

Para completar la jornada cultural, se desarrolló en Barrancabermeja el ‘Concierto por el amor eficaz’, que contó con la participación de distintas bandas musicales del país y extrajeras.

La peregrinación

El domingo 14 de febrero de 2016, como cierre de las actividades, un grupo de simpatizantes de las ideas y legado de Camilo Torres se enrutó hacia Patio Cemento, zona en la que murió el líder.

Sin embargo, en la vía que conduce de Barrancabermeja al municipio del Carmen de Chucurí, el paso se vio afectado por troncos y rocas. La caravana fue acompañada por efectivos del Grupo de Operaciones Especiales -GOES- de la Policía Nacional, del Ejército Nacional y era esperada por un cordón de policías del Escuadrón Móvil Anti Disturbios -Esmad-.

«El Estado no garantizó el desarrollo de la actividad, los medios masivos de comunicación estigmatizaron y contaron historias que no corresponden a la realidad, habitantes de la zona que ayudaron en los preparativos han sido amenazados por paramilitares», denunció Leonardo Jaimes, abogado e integrante del grupo de impulso del evento.

En paralelo a la llegada de los buses al punto donde se organizó una celebración ecuménica, dirigentes de la derecha carmeleña organizaron un plantón con el fin de confrontar a los asistentes con mensajes de repulsión y la figura del padre Camilo: «Se trata de un miedo infundado, de una manifestación que argumenta la paz en la zona vetando a toda costa la libertad de expresión e impidiendo la movilidad de una caravana pacífica que busca su espacio en esta historia de olvido. Es claro que no conocen de Camilo, solo saben de guerra, temor y balas. Acá traemos nuestra reflexión», aseguró María Montiel de Acción Libertaria.

Según la misma fuente, un retén detuvo los autobuses y prohibió continuar, estando a escasos kilómetros del sitio. Frente a la situación, los asistentes al evento continuaron a pie hasta llegar a un cordón de agentes del Esmad: «Sin certeza del sitio exacto de su muerte se hizo el acto simbólico de dar gracias al cielo por la vida de ese gran hombre, por la paz que se espera y la construcción de un movimiento cívico con vocación de transformar esta Colombia herida», sentenció Montiel.

Los eventos y conmemoraciones continúan. En Bogotá de esperan abría ecuménicos y culturales en universidades, barrios, capillas. Una gran parte de la sociedad colombiana mantiene viva la memoria del símbolo nacional Camilo Torres Restrepo.

CI IM/MP/15/02/16/11:00